Vinicius ya acabó su 2024, no estará este domingo contra el Sevilla (16.15, DAZN) por acumulación de tarjetas, así que al frente de las maniobras ofensivas del Madrid queda Kylian Mbappé, que en las últimas semanas ha seguido un camino paralelo a su equipo. El francés ha cogido aire, ha recolectado algunos goles y ha tomado cierta distancia de la tormenta que le amenazó después de los dos penaltis seguidos fallados en Anfield y San Mamés, y de su insuficiente desempeño general, culminado en el gatillazo personal de Liverpool.
“El periodo de adaptación de Kylian Mbappé ha terminado”, concluyó este sábado Carlo Ancelotti, que también ha respirado en el último mes. “Ha mostrado una buena versión y aún puede mejorar. En estos partidos lo ha hecho bien y se ha recuperado de la pequeña lesión. Está más motivado e ilusionado. Este periodo de adaptación lo necesitaba, como todos”, defendió el técnico italiano.
El ex del PSG sumó dos buenos tantos en Girona y Bérgamo, y remachó la bicicleta de Vini en la Intercontinental con el Pachuca. Tres emboques en los últimos cuatro encuentros. Contra el Getafe, además, un duelo celebrado en medio de sus sonados errores desde los 11 metros ante el Liverpool y Athletic, también se apuntó otra buena diana. Su efectividad ante la portería rival todavía no es la esperada, por el camino se ha dejado varios mano a mano, pero el engorde de las estadísticas más una sensación de mayor comodidad sobre el césped le ha permitido un alivio, un punto de apoyo en mitad de la ventisca. Según Carletto, no obstante, el proceso de mejora continúa abierto.
“Kylian solo tiene que jugar con más continuidad”, añadió el entrenador blanco. “Intentar hacer jugadas que solo él puede hacer con la máxima frecuencia posible. No le pido estar muy involucrado en el juego porque su mejor característica es el desmarque, atacar la línea. Luego necesitas que, cuando te desmarcas, alguien te meta el balón. Y tenemos a esos jugadores”, analizó Ancelotti.
Salvo el sancionado Vinicius, el preparador italiano cuenta frente al Sevilla con todos los jugadores, menos los tres cruzados rotos (Carvajal, Militão y Alaba). Ferland Mendy, el último con problemas musculares, también se incorporó a la lista. Respecto a Alaba, cuya rodilla izquierda se quebró hace justo un año, Carletto informó que espera tenerlo incorporado de pleno al grupo el 30 de diciembre, día de regreso de las vacaciones navideñas, y que podría estar disponible para jugar a mediados de enero. En las últimas semanas, han sido continuas las referencias del técnico a la vuelta cercana del austriaco. Con él, podría contar ya con cuatro centrales de hecho: Rüdiger, Asencio, Alaba y el reciclado Tchouameni, ahora titular fijo junto al alemán. El canterano, además, está siendo probado como lateral derecho para tratar de darle algo de respiro a Lucas Vázquez. Excepto emergencia, la intención de Ancelotti es no recurrir para esa posición a Fede Valverde.
Después de cinco partidos fuera de casa, el Madrid regresa al Bernabéu con mejor cara, el parte médico no tan condensado y menos ruido alrededor de Mbappé. Según Ancelotti, el aterrizaje ha concluido. Este domingo, le espera el Sevilla de Jesús Navas, que se prepara para disputar su último encuentro oficial.