Pepe Álvarez es reelegido secretario general de UGT para su tercer y último mandato | Economía


El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, en la clausura del Congreso Confederal de UGT este miércoles en Barcelona.
El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, en la clausura del Congreso Confederal de UGT este miércoles en Barcelona.Lorena Sopêna (Europa Press)

El secretario general de la Unión General de Trabajadores (UGT), Pepe Álvarez, de 68 años, ha sido proclamado este miércoles nuevamente para el cargo, en el que será su tercer y último mandato al frente de la organización sindical. En la votación del martes, el 80% de los delegados reunidos en el 44º Congreso Confederal de la UGT, celebrado en Barcelona, respaldaron la reelección de Álvarez y los nombres de la nueva Ejecutiva de la central, que tendrá tres miembros menos. En la nueva dirección habrá tres vicesecretarías generales: una ocupada por Lola Navarro; otra, la de Área interna, liderada por Rafael Espartero; y finalmente la de Política Sindical, pilotada por Fernando Luján. Espartero y Luján repetirán en el cargo. “Sentiros orgullosos de esta organización, aquí estamos a pesar de los que les gustaría que no estuviéramos”, ha dicho Álvarez en su discurso tras ser proclamado.

Álvarez llegó a la máxima responsabilidad de UGT en 2016, cuando relevó a Cándido Méndez, y después de haber ejercido como secretario general de UGT Cataluña desde 1990. En total, contando los cuatro años que ahora afronta en su tercer mandato hasta 2028, el sindicalista habrá estado 38 años dirigiendo la central, ya sea en la federación catalana o en la confederal. Nacido en Belmonte de Miranda (Asturias), Álvarez se trasladó con 19 años a Cataluña, donde trabajó tres años en la Maquinista Terrestre y Marítima (luego convertida en lo que es ahora Alstom), hasta 1978, momento a partir del cual empezó a tomar el liderazgo del Sindicato del Metal de Barcelona. Desde este puesto accedió luego a la secretaría general del sindicato en Cataluña.

El congreso en el que ha sido revalidado para un tercer mandato ha transcurrido sin tensiones internas: Álvarez era el único candidato que se presentaba y necesitaba al menos el respaldo de la mitad de los 800 delegados reunidos en esta cita. Las últimas tensiones que afrontó tuvieron lugar en 2022, cuando varios miembros de la Federación de Industria, Construcción y Agro (Fica UGT), incluido su secretario general, dimitieron por discrepancias con la dirección. Álvarez revalida el mando en un sindicato que ha crecido en afiliación un 20% en los últimos cuatro años, y ya suma 983.521 afiliados y un número de delegados con el que representan a casi un tercio de los trabajadores de España, lo que sitúa a UGT como el segundo mayor sindicato del país después de CC OO.

Álvarez ha repasado en su discurso los avances sociales y los pactos a los que ha llegado con el Gobierno y la patronal, como la subida del SMI, y ha dado por terminado un congreso en el que han estado presentes debates como la negociación para reducir la jornada laboral, el problema de la vivienda o la reforma de las pensiones. También la demanda, expresada por el secretario general, de que aumente la financiación pública para sindicatos y organizaciones empresariales para reconocer su labor en la negociación colectiva o en la elaboración de los planes de igualdad de las empresas.

Además de Álvarez y los tres vicesecretarios generales, en la Ejecutiva se mantendrán Cristina Estévez, como secretaria ejecutiva; Mari Carmen Barrera, que seguirá siendo secretaria de Políticas Europeas; Patricia Ruiz, que será ahora la responsable de Salud Laboral; y Amparo Burgueño, como secretaria ejecutiva. Como novedades, la Secretaría de Organización estará dirigida por Andrés Jesús Orta; la de Recursos y Estudios, por Luis Pérez Capitán y la de Internacional, por Jesús Gallego. Además, Diego Martínez y Alejandra de la Fuente tendrán también una secretaría ejecutiva.

El congreso empezó el lunes con la intervención de varias autoridades políticas, entre ellas la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, y el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo. El martes fue el turno del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que se dio un baño de masas en la congregación del sindicato del que es militante, y que comparte momento fundacional con el PSOE, en 1888. Y este miércoles —después de una fiesta por la noche para la que UGT reservó la sala Apolo— se ha celebrado la jornada de clausura, en la que ha intervenido el presidente de la Generalitat, Salvador Illa. “Los avances sociales no caen del cielo, son fruto de la combinación de gobiernos progresistas y sindicatos fuertes”, ha expresado Illa, quien ha señalado la vivienda como uno de los mayores problemas de los trabajadores: “¿Qué progreso hay cuando el trabajador se tiene que dejar el sueldo en vivienda?”, ha dicho el president, que ha repasado las medidas anunciadas por su Govern en esta materia, entre ellas la adquisición de 450 viviendas sociales de InmoCaixa.

La última jornada del congreso se ha desarrollado con actuaciones musicales, la proclamación de los resultados y el nombramiento de la nueva ejecutiva, así como la entrega de los premios Internacional UGT, entre ellos a Melibea Obono, activista LGTBI en Guinea Ecuatorial, o a Josep Borrell, Alto Representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, por su labor internacional política. El acto, como estaba previsto, ha terminado con el himno de La internacional.



source