La nueva competición que se inventó el año pasado la NBA para poner algo de sal y pimienta a la primera fase de la temporada comienza este martes. El decorado de fantasía de las pistas con que se disputa la Copa NBA ya está listo. Los equipos llegan al torneo tras un arranque de temporada regular con unas cuantas sorpresas. Los Cleveland Cavaliers son la revelación hasta el momento, que cuenta sus primeros 11 partidos por victorias, con lo que están por delante de los Celtics en una Conferencia Este en la que los Milwaukee Bucks de Giannis Antetokounmpo y los Philadelphia 76ers de Joel Embiid se han visto relegados a las posiciones de cola. Los primeros campeones de la competición de Copa, los Lakers, tendrán complicado superar siquiera la liguilla, pues en su grupo están los dos equipos más en forma de la Conferencia Oeste: los Oklahoma City Thunder y los Phoenix Suns.
Dado el cargado calendario de competición, la NBA se las ingenió para crear una especie de grupos virtuales dentro de la temporada regular, de modo que los partidos son a la vez de la liga y de la copa. Son seis grupos de cinco equipos que se sortean tomando en cuenta las posiciones de la pasada temporada regular para tratar de que estén equilibrados. Sin embargo, han terminado coincidiendo algunos de los equipos más en forma del comienzo de la temporada.
Hay tres grupos en la Conferencia Este y otros tres, en la Oeste. Se clasifican para cuartos de final los campeones de cada grupo y el mejor segundo de cada conferencia. Las semifinales y la final se jugarán en el T-Mobile Arena de Las Vegas en diciembre. La final es el único partido que no cuenta además para la liga.
En la Conferencia Este, los Celtics, campeones de la NBA del año pasado, coinciden en el grupo C con los Cleveland Cavaliers, el equipo más en forma del momento. Los Celtics mantienen íntegro el bloque que les llevó a conquistar el anillo, aunque su pívot titular, Kristaps Porziņģis, ha comenzado la temporada lesionado. En Cleveland, Kenny Atkinson ha engrasado la maquinaria. Donovan Mitchell, Darius Garland y Evan Mobley se reparten la responsabilidad anotadora, mientras que el propio Mobley y Jarrett Allen lideran la defensa. El resultado está siendo espectacular. Son el único equipo con más de un 50% de acierto en tiros de campo y el viernes aplastaron a los Golden State Warriors con una primera mitad para enmarcar (83-42). Llevan un balance perfecto de 11 victorias y cero derrotas y se lo pondrán difícil a los Celtics para lograr la primera plaza del grupo, aunque los de Boston tendrán la ventaja de campo en el duelo directo de la liguilla, que se juega a una sola vuelta. Los otros tres equipos del grupo (Chicago Bulls, Atlanta Hawks y Washington Wizards) serán los convidados de piedra.
En el grupo A del Este los favoritos son los New York Knicks, aunque las piezas no hayan encajado aún del todo con la llegada de Karl Anthony Towns. Los 76ers parecían reforzados con los fichajes de Paul George (procedente de Los Angeles Clippers) y de Caleb Martin (llegado de los Miami Heat), pero han empezado la temporada con una única victoria en los primeros ocho partidos. Su estrella, Joel Embiid, aún no ha jugado ni un minuto, primero por lesión y después por una sanción de tres partidos por empujar a un periodista que le criticó en un artículo. La única alternativa a los Knicks parecen los Orlando Magic, pero tampoco andan muy finos. Brooklyn Nets y Charlotte Hornets son los dos equipos más débiles del grupo.
Donde tampoco están funcionando las cosas es en los Milwaukee Bucks, con solo dos victorias en 10 partidos pese a los titánicos esfuerzos de Antetokounmpo (promedia 30,1 puntos y 12,8 rebotes) por tirar del equipo. Los Bucks son cabezas de serie del grupo B del Este, pero su mal momento convierte a los Indiana Pacers (finalistas de la Copa NBA el año pasado) en favoritos. El grupo lo completan Miami Heat, Toronto Raptors y Detroit Pistons, teóricamente más débiles.
El ‘grupo de la muerte’
En el Oeste, el grupo de la muerte es el B. Allí coinciden los dos primeros de la conferencia (Oklahoma City Thunder y Phoenix Suns) y el campeón de copa del año pasado (Los Angeles Lakers). Los de Oklahoma combinan la mejor defensa de la liga, en la que Chet Holgrem mete miedo bajo el aro, con la inspiración de Shai Gilgeous-Alexander en ataque. En los Suns, Kevin Durant, que parecía rejuvenecido, ha sufrido una lesión de gemelo que le mantendrá al menos dos semanas fuera de la pista. En los Lakers el que está en plena forma (32,4 puntos, líder de la NBA, y 11,2 rebotes por partido) es Anthony Davis, que ha eclipsado a LeBron James en el inicio de temporada. Bronny James, el hijo de El Rey, ha hecho historia al compartir pista con su padre, pero tiene un papel cada vez más marginal y ha sido relegado a jugar con el filial de la G League. Los Utah Jazz y los San Antonio Spurs de Victor Wembanyama completan el grupo.
El grupo C también tiene tres pesos pesados, entre ellos los dos últimos campeones del Oeste: los Denver Nuggets de Nikola Jokić y los Dallas Mavericks de Luka Dončić. Como ninguno de los dos anda muy fino, los Golden State Warriors de Stephen Curry, que han empezado la temporada con 7 victorias y 2 derrotas, pueden intentar dar la sorpresa. Menos opciones tienen los Pelicans de Nueva Orleans y los Grizzlies de Memphis.
En el grupo A del Oeste los favoritos son los Minnesota Timberwolves de Anthony Edwards, un equipo aún en rodaje tras la salida de Karl Anthony-Towns y la llegada de Donte DiVincenzo y Julius Randle. La principal alternativa serán los Clippers, con los Sacramento Kings como terceros en discordia y con unos Houston Rockets y Portland Trail Blazers sin apenas opciones.
Los partidos de la liguilla se juegan los martes y los viernes hasta el 3 de diciembre. Los dos partidos más atractivos de este martes son el 76ers-Knicks y el Warriors-Mavericks. Los cuartos de final, a partido único, serán el 10 y el 11 de diciembre; las semifinales el 14 y la final de la Copa NBA, el 17. La primera edición impulsó el interés de los aficionados y las audiencias. Los directivos de la liga esperan que la historia se repita.