Llegaban Mallorca y Valencia de dos buenas experiencias, que en el fútbol siempre son los triunfos, aunque después de dos trayectorias diferentes, porque si el equipo isleño parece lejos de esos apuros ligueros de temporadas precedentes, y desde el comienzo de la Liga encadena una dinámica positiva que va poco a poco llenando las gradas de Son Moix, el Valencia continúa en su época de vacas flacas, que ya dura demasiadas temporadas para un club con otras ínfulas antaño y que ocupaba puestos de descenso. Así que, en el comienzo, cada uno asumió su rol, más humilde el del Valencia, más confiado, sin llegar a jactancioso, del Mallorca, que además jugaba en casa.
2
Dominik Greif, Martin Valjent, Antonio Raíllo, Mateu Morey (Pablo Maffeo, min. 77), Johan Mojica, Dani Rodríguez (Valery Fernández, min. 69), Robert Navarro (Antonio Sánchez, min. 69), Manu Morlanes, Sergi Darder (Omar Mascarell, min. 84), Samú Costa y Cyle Larin (Abdón Prats, min. 78)
1
Giorgi Mamardashvili, César Tárrega, Dimitri Foulquier, Cristhian Mosquera, José Gayà, Yarek Gasiorowski (Dani Gómez, min. 83), Luis Rioja (Germán Valera, min. 74), Enzo Barrenechea (André Almeida, min. 83), Diego López, Javi Guerra (Pepelu, min. 74) y Hugo Duro
Goles
0-1 min. 31: Luis Rioja. 1-1 min. 47: Cyle Larin. 2-1 min. 80: Abdón Prats
Arbitro Alejandro Quintero González
Tarjetas amarillas
Luis Rioja (min. 61), Valjent (min. 70)
Pero no llegó a nada el interés local por dominar en todos los terrenos frente a un rival un tanto acelerado, que poco a poco fue atemperando sus impulsos y, con el paso de los minutos, fue cambiándole el color al partido, alejando al Mallorca de las cercanías de Mamardashvili, y sintiéndose más cómodo en campo rival. No habían ido a más las incursiones de Robert Navarro, bien tapado por los imberbes centrales valencianistas, que construyeron una pared delante de Larin, en un Mallorca que echaba de menos la potencia salvaje de Muriqi, y empezó Gayá a subir la banda contraria, y a dejarse ver Diego López.
El Valencia inquietaba a balón parado, pero tuvo que ser un accidente el que removiera el partido, cuando en un centro al área que parecía intrascendente, el colombiano Mojica abrió el brazo y golpeó la pelota. No lo vio el árbitro, que estaba delante de la jugada pese a que la acción era clara, pero sí el VAR, así que el penalti resultó inevitable. Lo convirtió Luis Rioja con un disparo duro.
Como había cambiado la dinámica del partido minutos antes, al Mallorca le costó bastante volver a tener la iniciativa. El Valencia le había cogido la medida al equipo de Arrasate, y tomándoselo con tranquilidad, evitó que los de casa se impusieran con su juego, aunque había síntomas de que las cosas estaban cambiando. El Mallorca empezó a aprovechar con más asiduidad las bandas, y cuando la primera parte entraba en el descuento, Dani Rodríguez recibió en carrera junto a la línea de banda, y su centro lo desvió Larin para empatar. Pidieron fuera de juego los valencianos, pero el VAR fue implacable de nuevo.
La segunda parte fue bastante plana, sin matices, con pocas cosas para contar, salvo la buena aplicación defensiva de los dos equipos, aunque el Valencia fue perdiendo fuelle, como si hubiera gastado todas sus balas en los primeros 45 minutos. Sin embargo, al Mallorca le quedaba una, que recicla partido tras partido, su ya casi eterno capitán Abdon Prats. Apareció en el campo en el minuto 79, para dar descanso a un Larin agotado. En el 81, su cabezazo, a centro de Darder, desequilibró el partido y le dio la victoria a su equipo. La depresión del Valencia sigue ahí; la euforia del Mallorca empieza a dispararse.