El socialista José Bono cuenta en sus memorias que en 2011 ensayó con el rey Juan Carlos cómo debía comportarse este en una recepción prevista con Mikel Errekondo, representante de la izquierda abertzale en Madrid. Bono asegura que adiestró al monarca para que estrechase la mano del diputado de lo que entonces se llamaba Amaiur manteniendo siempre “un gesto grave”. Ocho años después, cuando la portavoz del PSOE en el Congreso, Adriana Lastra, y el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, Rafael Simancas, se hicieron por primera vez una foto con los representantes de EH Bildu, el método Bono seguía vigente. Ambos posaron con gesto tan grave “que hasta parecía a propósito”, recuerda la portavoz de los abertzales en el Congreso, Mertxe Aizpurua.
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