A la pregunta de cómo calentar la cama antes de dormir en las semanas más gélidas del invierno, no hay una única respuesta. Cada lector de EL PAÍS Escaparate tendrá su propio sistema para pasar el menor frío posible al optar, por ejemplo, por elegir sábanas de coralina o franela. Con todo, hemos profundizado en el catálogo de Amazon para encontrar los calentadores de cama con mejor relación calidad-precio. Tanto los más clásicos, como las bolsas de agua caliente, como los calentadores de cama eléctricos que ofrecen un calor duradero y uniforme.
¿Cómo calentar la cama en invierno?
Entre los aparatos para calentar la cama de uso doméstico que se pueden utilizar aquellos modelos calentadores de cama eléctricos son los más rápidos en ofrecer los resultados deseados. Entre los que sobresalen las mantas eléctricas. Su diseño las hace muy fáciles de colocar encima de las sábanas, aunque también existen las que se ponen debajo de la sábana bajera. Por todo ello, calentar la cama en invierno tiene numerosas ventajas:
- Los calentadores de cama son productos que focalizan el calor en un punto en concreto y permiten reducir la calefacción en otras zonas de la casa.
- Un calentador de cama también alivia ciertas dolencias corporales y, como sucede con las mantas eléctricas, se adaptan a numerosas partes anatómicas.
- En el caso de los calentadores eléctricos para la cama, son modelos que cuentan con un termostato la intensidad del calor mediante un interruptor manual.
- Entre los beneficios que tiene calentar la cama antes de dormir, conciliar el sueño con rapidez y no despertarnos de madrugada resultan clave.
Bolsa de agua caliente con funda ecológica
A la venta en ocho colores atractivos en Amazon, esta bolsa de agua para calentar la cama tiene una capacidad de 1,8 litros. Su funda exterior, confeccionada en tela de vellón ecológica, proporciona una textura peluda suave y agradable al tacto. El producto no solo sirve como calentador de camas también alivia los dolores o enfriamientos en espalda, cuello, hombros o pies. Incluido, dolores de embarazo o menstruales.
Manta eléctrica Medisana con apagado automático
Es el producto más vendido de su categoría en Amazon y supera las 20.000 valoraciones: el recurso más práctico para generar el calor suficiente durante horas. Dadas sus dimensiones, 150 x 80 cm, puede extenderse sobre el tamaño de cualquier cama. Además, su parte exterior se encuentra acolchada y puede regular su temperatura en tres niveles.
Almohadilla térmica de terciopelo para atarse en espalda y pecho
Muchas personas solo necesitan un extra de calor puntual para encontrar el grado de confort óptimo antes de irse a dormir. Por eso mismo, las mantas eléctricas atadas al cuerpo con varias opciones de temporizador resultan ideales. El producto destacado en la imagen se apaga automáticamente tras 30, 60, 90 o 120 minutos de uso. Como apunte adicional, dispone de un circuito de aislamiento que impide sobrecalentar el cuerpo.
Calentador de cama redondo con funda de seguridad
Este otro calentador de cama eléctrico es una alternativa que sorprenderá a muchos lectores por su gran eficiencia, en especial, para usarlo como calentador de pies. Además, su funcionamiento es muy intuitivo: gracias a su sistema acumulador térmico, con solo cargarlo tres minutos el aparato proporcionará varias horas de calor residual.
Calefactor eléctrico e inalámbrico de pequeño tamaño
Cerramos la selección con esta otra solución para dormir expulsando el frío de la cama en las noches más invernales: se trata de un calefactor eléctrico de bajo consumo equipado con la mejor tecnología cerámica. Incorpora termostato de seguridad y apagado automático una vez alcanzada la temperatura deseada, y puede usarse de manera inalámbrica, por lo que se puede llevar a cualquier viaje. Incluye también una funda lavable.
Preguntas frecuentes sobre calentadores de camas
¿Cuál es el consumo de electricidad aproximado de una manta eléctrica?
Dependerá del modelo en cuestión y de cuánto tiempo se use de manera diaria en los meses más fríos, pero haciendo un uso razonable su consumo es moderado, ya que una manta eléctrica estándar equipa entre 100 y 150 vatios de potencia. Es decir, usándola durante tres o cuatro meses al año a razón de cinco o seis horas por noche, su consumo excedería por poco los 100 kWh.
¿Qué otros sistemas tradicionales existen para calentar la cama sin electricidad?
El más socorrido y barato es, como no podía ser de otra manera, echar mano de una manta extrasuave y cálida.
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*Todos los precios de compra incluidos en este artículo están actualizados a 4 de enero de 2025.
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