El Gobierno del presidente de EE UU, Joe Biden, ha autorizado a Ucrania a utilizar el armamento estadounidense para atacar el interior de Rusia, según la agencia Reuters y los periódicos The New York Times y The Washington Post. El paso representa un giro de enormes proporciones en la política de Washington en esa guerra, donde hasta ahora la Casa Blanca se oponía a que los ataques de Kiev se adentraran en territorio ruso por preocupación a que Moscú pudiera responder de manera contundente.
Según Reuters, que cita “fuentes familiarizadas con el asunto”, Ucrania planea llevar a cabo su primer ataque de larga distancia en el interior de Rusia en los próximos días. Utilizaría para ello los sistemas de misiles ATACMS que Estados Unidos comenzó a proporcionarle este año.
El cambio en la posición estadounidense llega dos meses antes de la investidura de Donald Trump como nuevo presidente, el 20 de enero. El líder republicano se expresa en términos elogiosos hacia el presidente ruso, Vladímir Putin, y asegura que en su mandato pondrá fin a la guerra en cuestión de un día.