La Dirección General de Tráfico (DGT) ha puesto en marcha desde hoy lunes y hasta la medianoche del próximo domingo una campaña especial de control de consumo de alcohol y drogas, con motivo del inicio de las Navidades, unas fechas en las que aumentan las celebraciones familiares y amigos junto con actos de empresa y colectivos. Esto hace que se incremente el consumo de bebidas alcohólicas, con el consiguiente riesgo por parte de las personas que se ponen al volante. La campaña la realizarán en todo el territorio español la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil y las policías locales, que podrán montar los puntos de verificación en cualquier lugar y a cualquier hora. No se limitarán solo a los habituales horarios nocturnos, como es frecuente en estos controles.
Según ha explicado esta mañana el subdirector general de Movilidad y Tecnología de la DGT, Francisco José Ruiz Boada, “los estudios demuestran que el alcohol aumenta el riesgo desde la primera consumición”. “Incluso estando por debajo del límite legal, beber significa ponernos en riesgo a nosotros mismos y poner en riesgo a las personas con las que compartimos el vehículo y la vía pública. Una inmensa mayoría de personas evitan consumir alcohol si van a conducir, y es posible reducir aún más el impacto de este importante factor de riesgo”, ha afirmado. Los datos recogidos por Tráfico demuestran que el consumo de alcohol y drogas siguen siendo los tres principales factores de riesgo en los accidentes de tráfico: estuvieron presente en el 13% de los siniestros de tráfico con víctimas en 2023 y, como factor concurrente, en el 26% de aquellos en los que hubo muertos, con 246 casos asociados.
La Memoria 2023 de Hallazgos Toxicológicos en Víctimas de Accidente de Tráfico, elaborada por el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses con la colaboración del Observatorio Nacional de Seguridad Vial y presentada el pasado verano, sacaba a la luz que más de la mitad (53,6%) de los conductores fallecidos en carretera en 2023, que fueron sometidos autopsia y a un análisis toxicológico dieron positivo en alcohol, drogas o psicofármacos, aisladamente o en combinación, un porcentaje que un año más aumenta con respecto al año anterior (+0,8% comparado con los datos de 2022).
Por todos estos datos, Tráfico mantiene que son imprescindibles estas campañas preventivas, ya que busca que se cree la conciencia entre los conductores que al volante “la única tasa segura es 0,0%”. Eso sí, también reconoce que la conciencia sobre el consumo de estas sustancias está creciendo entre la población, pese a lo cual siempre hay infractores.
Hasta delito
La tasa máxima permitida de alcohol es de 0,25 miligramos de alcohol por litro de aire espirado en los conductores en general y se reduce a 0,15 para los profesionales y los noveles. Si se hace la prueba en sangre ―poco habitual y solo utilizado en caso de contraanálisis―, la tasa es 0,5 gramos de alcohol por litro de sangre (0,25 gramos, para los profesionales y los noveles). Las sanciones varían en función de la tasa detectada. Entre 0,25 y 0,50 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, la multa es de 500 euros y cuatro puntos del carné. Si se superan esos 0,50 miligramos, la sanción es de 1.000 euros y seis puntos. Esta también se aplica a los conductores infractores reincidentes.
En el caso de las drogas, no se detecta la cantidad consumida, sino solo su presencia a través de un test. La sanción es de 1.000 euros y seis puntos del carné.
Ahora bien, determinadas cantidades de alcohol y el consumo de drogas llevan aparejadas la comisión de un delito contra la seguridad vial, tipificado en el artículo 379.2 del Código Penal. Este recoge penas de tres a seis meses de prisión, multa de seis a 12 meses o trabajos en beneficio de la comunidad entre 30 y 90 días, junto con la privación del permiso de conducción entre uno y cuatro años. La negativa a someterse a las pruebas también está tipificada como delito y acarrea prisión de tres meses a un año y la retirada del carné entre uno y cuatro años (artículo 383 del Código Penal).
Desde la entrada en vigor del permiso por puntos (el 1 de julio de 2006), alrededor del 13% de los infractores sancionados y del 13% de los puntos detraídos han estado relacionados con el hecho de conducir con una tasa de alcohol superior a la establecida, según datos de Tráfico.
A punto de superar la cifra de fallecidos en 2023
Un total de siete personas han fallecido en los siete siniestros mortales registrados en las carreteras durante el pasado fin de semana, según ha informado hoy lunes la Dirección General de Tráfico. Dos de los fallecidos eran motoristas y tres, peatones. Cinco de los siniestros han ocurrido en carreteras convencionales y dos en autopista o autovía.
Entre los siniestros han habido tres atropellos a peatón, dos salidas de la vía y una colisión. Los siniestros han tenido lugar en: El Ejido (Almería), Selva (Baleares), Castroverde (Lugo), Las Rozas de Madrid (Madrid), Murcia y San Javier (Murcia) y Tordesillas (Valladolid).
En el acumulado anual hasta el 15 de diciembre se llevan contabilizados 1.100 personas fallecidas en las carreteras, un dato que se aproxima a las 1.145 víctimas mortales registradas durante todo 2023, cuando aún quedan 16 días para finalizar el año y la Operación de Navidad en la que hay un alto número de desplazamientos.