Alberto Núñez Feijóo pactó con Carlos Mazón que este anunciara el pasado viernes que no se presentará a la reelección en 2027 si no es capaz de recuperar la confianza de los valencianos tras la tragedia de la dana. Pero, cumplido ese gesto, el líder del PP sigue presionando al presidente de la Generalitat valenciana. En su discurso en abierto ante la Junta Directiva Nacional, reunida este lunes en Madrid, Feijóo ha lanzado varios mensajes dirigidos al barón valenciano, a quien ha pedido “humildad” y ha instado a seguir “reconociendo errores y asumiendo responsabilidades”, mientras ha igualado la responsabilidad en la catástrofe de la Generalitat y el Gobierno central. “Ya no caben más equivocaciones”, ha advertido el líder del PP ante la plana mayor del partido y en ausencia de Mazón, que se encuentra en Valencia dirigiendo la respuesta a la emergencia.
Era la primera vez que Feijóo se pronunciaba en público tras la comparecencia de Mazón del viernes en las Cortes Valencianas, después de la cual la cúpula del partido en Génova se mostró satisfecha y destacó el “paso valiente” de Mazón. Este lunes, sin embargo, el discurso de Feijóo ante la Junta Directiva Nacional ha destilado que el líder no está del todo satisfecho con esa comparecencia, y pide más.
“Los políticos debemos reflexionar [sobre] todo lo que ha ocurrido”, ha comenzado Feijóo en una intervención ante los suyos que ha destinado sobre todo a hablar de la catástrofe de Valencia. “Cuando la respuesta ciudadana supera a la respuesta política, lo único que cabe es la humildad de reconocerlo y la voluntad de enmendarlo”, ha subrayado, sin mencionar a Mazón. A renglón seguido, Feijóo ha pedido “a las dos administraciones competentes”, esto es, “al Gobierno y a la Generalitat”, que, “si aspiran a estar a la altura de la gente, si también desean honrar a las víctimas y si quieren ser justas con lo que ha pasado, ambas” asuman dos cuestiones. La primera, “evaluar desde la crítica y la autocrítica la tragedia”; y la segunda, “compensar lo ocurrido con un proceso de reconstrucción que permita a la gente volver a vivir con normalidad y tener la seguridad de que esto no va a volver a ocurrir”. Si Feijóo considera que la Generalitat valenciana debe evaluar desde la autocrítica la tragedia, después de que Mazón diera sus explicaciones el viernes ante las Cortes valencianas, se desprende que es porque le hace falta más.
En otro pasaje de su discurso Feijóo se ha dirigido ya específicamente a Mazón y al PP de la Comunidad Valenciana. “Tenéis que seguir”, les ha dicho. “Tenéis que seguir dando la cara, ayudando al pueblo, escuchándolo, porque la rabia y la decepción hay que entenderla”, les ha alentado. “[Seguir] Dando explicaciones, reconociendo errores, asumiendo responsabilidades, y haciendo de la reconstrucción una obligación en la que ya no caben equivocaciones”. El líder del PP ha instado por tanto a los suyos a reconocer más errores y a asumir responsabilidades, algo que de momento no ha hecho ningún dirigente del Gobierno valenciano. El president anunció una remodelación de su Ejecutivo, de la que hasta ahora solo se conoce que Susana Camarero es la nueva portavoz, después de rechazar la cartera de la reconstrucción.
“La confianza, cuando se ha resentido, hay que volver a ganarla”, ha instado Feijóo al PP valenciano, que le escuchaba en parte en la Junta representado por el secretario general del PP de la Comunidad Valenciana, Juan Francisco Pérez Llorca, y otros diputados y cargos autonómicos.
El líder del PP equipara las responsabilidades del Gobierno central y de la Generalitat en la tragedia. “Por mucho que trate de borrarse, los ciudadanos saben que una emergencia nacional no es exclusiva de una comunidad autónoma”, ha remarcado Feijóo para atacar a La Moncloa, aunque su barón renunció a reclamar la declaración de emergencia nacional que le habría arrebatado el mando. “Si el Gobierno no está para esto, ¿para qué está?”, ha incidido, en cambio, Feijóo.
El PP pretende cobrarse alguna pieza política del PSOE y ha dirigido toda su artillería contra la vicepresidenta del Gobierno Teresa Ribera, tratando de frustrar su elección como comisaria europea y número dos de Úrsula Von der Leyen. “Quien ha sido una mala ministra no merece ser premiada en ningún sitio, y menos vicepresidenta de todos los europeos. No con nuestros votos, no con los votos de los eurodiputados del PP”, ha enfatizado hoy Feijóo, manteniendo el veto a Ribera. Fuentes del equipo del líder popular han trasladado que el PP abre la puerta a votar en contra de todo el Gobierno de Von der Leyen —pese a que la presidenta de la Comisión Europea pertenece a su propio partido en Europa— si en este se encuentra Ribera como comisaria.
El PP sigue incómodo ante las consecuencias de la catástrofe de Valencia, como se ha percibido en una Junta Directiva en la que el silencio ha predominado entre las filas populares, tanto entre los barones como en miembros de la dirección como el portavoz, Borja Sémper. Solo dos de los líderes autonómicos del PP han querido hablar ante la prensa para valorar la gestión de la crisis por parte de Mazón y su comparecencia del viernes: Fernando López Miras, presidente de la Región de Murcia, y Paco Núñez, presidente del PP en Castilla-La Mancha.
Ambos dirigentes han evitado defender expresamente a Mazón. Se han limitado a afirmar que el dirigente valenciano al menos ha dado “explicaciones”, aludiendo a la comparecencia de seis horas en el Parlamento regional, donde no mencionó su comida con una periodista el día de la dana. “Se habla de quién tiene que dimitir, de a qué hora dio la alerta la Confederación [Hidrográfica del Júcar], a qué hora se reunió el Cecopi… Sí, sí, si de eso habrá que hablar”, ha reconocido López Miras, y ha puesto el foco en que “ahora lo importante” es que los valencianos “vuelvan a la normalidad”. “Hizo una valoración muy interesante. Hizo cierta autocrítica”, ha apostillado Núñez. El mensaje es unitario entre los barones desde la semana pasada, apuntando a que Mazón “da la cara” en contraposición al Gobierno central, y a que habrá que depurar responsabilidades en el futuro.