Mezclar negocios y familia no siempre es buena idea y la cantante Jewel Kilcher (Payson, Utah, 48 años) es una nueva prueba de ello. La cuatro veces nominada al Grammy afirma que su madre, Lenedra Carroll, quien también era su representante, le quitó más de 100 millones de dólares de su patrimonio a lo largo de su carrera musical. “Realmente, no me di cuenta de lo que era mi madre hasta que tuve treinta y tantos años. Me desperté y me di cuenta de que malversó todo mi dinero”, confesó este lunes en el pódcast Verywell Mind de la psicoterapeuta Amy Morin.
La cantautora estadounidense, autora de temas como You were meant for me o Foolish games, ha vendido más de 27 millones de álbumes en todo el mundo desde que comenzó su carrera, a los 21 años, en 1995. Pero, según explicó en la entrevista, a los 34 descubrió que tenía una deuda de tres millones de dólares. “Me di cuenta de que mi madre me había robado, me di cuenta de que todo lo que pensaba que mi madre era, no era verdad. Fue algo muy difícil de aceptar psicológicamente”, admitió.
Los padres de Jewel se divorciaron cuando era una niña de ocho años y tanto ella como sus dos hermanos mayores, Shane y Atz, se fueron a vivir con su padre, mormón. “Nadie me dijo que era porque mi mamá no quería ser mamá. Ella nos dejó, así que mi padre se hizo cargo de criarnos. No lo sabía en ese momento”, recordó. Aun así, su padre, el también artista musical Atz Klicher, tampoco salió bien parado y lo tachó de “abusador”: “Era un alcohólico volátil que me pegaba, muy fácil de identificar como ‘chico malo’. Mi mamá parecía todo lo contrario”, explicó. “Estaba tranquila, era suave, nunca gritaba… Obviamente, nunca me pegaba. Y no me di cuenta de que abusaba de mí de otra manera en ese momento”, comentó sobre la supuesta malversación de su progenitora.
En 2016, Jewel ya aseguró en su libro autobiográfico, Never Broken, que su infancia no fue nada fácil. Además, en ese momento la cantante también lanzó un álbum complementario, Picking up the pieces, que incluía canciones como My Father’s Daughter, (que podría traducirse como Hija de mi padre) a dúo con Dolly Parton, y Family Tree (Árbol familiar) donde cuenta cómo aprender a vivir con el legado de su familia. “Mi madre no es una villana”, consideraba Jewel en ese momento, hace ya siete años: “Mi padre no es un villano. La gente hace algunas cosas bien y algunas cosas mal. Y la canción Family Tree trata sobre eso”.
En la entrevista de este lunes, en cambio, Jewel aprovechó para criticar que sus preocupaciones cayesen en oídos sordos cuando acudía a su madre en busca de apoyo. “Digamos que, cuando aparecía en su puerta, ella decía cosas como: ‘Nuestras mentes son muy poderosas y creo que tú, Jewel, eres tan poderosa que podrías sentarte aquí, mirar esta bombilla y hacer que se apague con tu mente”, relató. Lo que entonces le parecía una muestra de amor, ahora lo atribuye a indiferencia: “La verdad, eso significaba que mi madre no quería quedarse ahí y estar conmigo y me cuidó haciéndome mirar bombillas. Así que la apariencia de una figura, a veces, no es la que parece”, se sinceró la cantante, que este enero lanzó un dueto con Julio Iglesias Jr.
Esta relación insana con sus progenitores y su éxito precoz han influido negativamente en la salud mental de la cantante, según ella misma ha afirmado en más de una ocasión, pero también la han convertido en una gran activista por la causa. De hecho, la artista cofundó la ONG Inspiring Children Foundation (junto al empresario y filántropo Ryan Wolfington) hace más de 20 años con el objetivo de mejorar la salud mental de los jóvenes y, recientemente, lanzó su propia aplicación de salud mental, Innerworld, que hace que los recursos sean accesibles a través de un mundo virtual. “No tenía una figura segura mientras crecía”, reconoció Jewel en la charla con Morin, “pero esa es también la razón por la que creé nuestra fundación juvenil, porque hay una esperanza real para niños así”.