Pere Navarro (Barcelona, 70 años), director de la Dirección General de Tráfico (DGT) en los Gobiernos de Pedro Sánchez y de José Luis Rodríguez Zapatero, aguarda una de las grandes pruebas del año. La Operación Especial de Semana Santa arranca hoy a las tres de la tarde con 16 millones de desplazamientos previstos por carretera hasta el 10 de abril, festivo en seis comunidades (Baleares, Cataluña, Comunidad Valenciana, La Rioja, Navarra y País Vasco). El año pasado fallecieron 27 personas: 19 en carreteras convencionales y 8 en autopistas y autovías. “Primer mensaje: los accidentes en Semana Santa no son en los viajes largos. Son en los desplazamientos cortos”, advierte Navarro. El referente internacional en seguridad vial desde que redujo drásticamente las muertes en el asfalto con la implantación del carnet por puntos recalca que suelen coincidir con los destinos de vacaciones, en los que el conductor se confía y relaja las normas de conducción.
Al 100% al volante. “El 42% de los 1.145 fallecidos en carretera en 2022 se produjo tras una salida de la vía. Algunos de estos accidentes fueron porque el conductor se durmió. En España cada vez dormimos peor. Ponerse al volante con sueño atrasado es de alto riesgo. Si el conductor está cansado, si lleva sueño atrasado o no ha dormido bien, no debemos dejarlo conducir”. La DGT recomienda parar cada dos horas o cada 200 kilómetros y hacer una pausa de al menos 20-30 minutos.
El cinturón salva vidas. “Uno de cada cuatro fallecidos en turismo o furgoneta en 2022 —142 personas— no llevaba el cinturón de seguridad. Esto es una tragedia. Si lo hubiesen llevado puesto en el momento del accidente, la mitad se habrían salvado. Cuesta poco ponérselo, además está el pitido en los coches modernos que avisa si no se ha puesto. No entiendo las trampas a las que se recurren, como un gancho que se vende para que parezca que se lleva el cinturón. Eso es hacerse trampas en solitario. Si haces eso, solo tú sales perdiendo”. La Guardia Civil de Tráfico realizó una campaña especial de vigilancia a principios de marzo en la que formuló 5.405 denuncias a conductores y pasajeros por no hacer uso del reglamentario sistema de retención. El 76% de las denuncias fueron puestas en carreteras convencionales, precisamente las que concentran el mayor número de víctimas mortales.
Los agentes también detectaron a 316 menores con una altura igual o inferior a los 135 centímetros que viajaban sin hacer uso de un sistema de retención infantil o que lo hacía de manera incorrecta, 249 en los asientos traseros y 67 en los delanteros. La DGT insiste en que nueve de cada diez lesiones infantiles graves o mortales se habrían evitado si se hubieran utilizado los sistemas de retención obligatorios. “Un problema crónico y no resuelto es el de las sillitas. Nos gustaría ir a un modelo en el que los hospitales de maternidad te dieran la sillita, y con el tiempo tú la devuelves, la cambias y entonces te dan otra nueva que te sirva para cuando [el menor] ha crecido. No es fácil, pero evitaría [el problema que implica] para mucha gente comprar y cambiarla según crecen los hijos”.
En carretera, 0,0% de alcohol. El Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses detectó en la mitad de los conductores fallecidos en carretera en 2021 a los que se practicó la autopsia la presencia de alcohol, drogas o psicofármacos. “La campaña de este año en Semana Santa la vamos a centrar mucho en el alcohol, que es la causa de uno de cada tres siniestros mortales de tráfico. Alrededor de 50.000 condenas penales al año son por conducir con muy altas tasas de alcohol, el 75% de los conductores a los que se hizo la autopsia tenían una tasa de alcoholemia igual o superiores a 1,2 gramos por litro… Es una barbaridad tras otra barbaridad. Nos ha costado mucho a todos llegar hasta aquí como para que algo así te pueda costar la vida en la carretera”.
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El móvil, el gran enemigo. Las distracciones al volante son la primera causa de accidentes mortales. Un gran número se deben al empleo indebido del teléfono móvil, que multiplica por cuatro el riesgo de sufrir un accidente. “Lo hemos hecho todo, hemos lanzado campañas explicativas, hemos subido a seis puntos ir con el teléfono móvil en la mano, hemos puesto 216 cámaras de alta definición que cogen imágenes que nos permiten ver si se está usando el móvil… La Guardia Civil adquirió también furgonetas camufladas porque al ser más altas facilitan el uso del teléfono móvil. Pero todo esto no sirve de nada si el ciudadano no lo interioriza y no se convence del riesgo que supone llevar el teléfono móvil en la mano. Se ha cumplido el primer aniversario de la vigente Ley de Tráfico y Seguridad Vial, que precisamente ha endurecido el empleo del móvil, pero aún es pronto para sacar conclusiones de su impacto y los cambios que puede estar provocando en la conducción”.
Extremar la precaución si hay que salir del vehículo. “El año pasado se contabilizaron 126 muertos por atropello en carretera, seis en Semana Santa. Supone que uno de cada diez fallecidos en vías interurbanas lo fueron por ese motivo. Y no eran únicamente peatones. Pedimos mucho cuidado al salir del vehículo sobre todo en las autopistas y autovías por la velocidad y densidad del tráfico: 16 conductores que habían bajado del vehículo fallecieron por atropello en 2022 en España. En el Reino Unido han quitado la obligación de bajar a colocar el triángulo en autopista y autovía. Es una opción que aquí se estudiando. La alternativa es una luz de emergencia V16: sacas la mano por la ventanilla y lo colocas en el techo sin que te expongas fuera del vehículo. Además, se ve desde mucha más distancia y está localizada”.
Limitaciones a los conductores más mayores. “No es una campaña específica de Semana Santa, es algo que lleva décadas implementado, pero conviene recordarlo por el progresivo envejecimiento de la población: cuando los conductores de mayor edad van al centro de reconocimiento de conductores, hay casos en los que se les renueva el permiso pero con una limitación para circular en un radio de 30 o 50 kilómetros alrededor de su domicilio. De este modo pueden desplazarse para ir al médico, a hacer sus compras o ver a la familia. Cubren sus necesidades, pero no pueden hacer viajes largos porque no reúnen las condiciones requeridas. Otro tipo de restricción es que no puedan circular de noche, que solo puedan conducir por el día, desde una hora después del amanecer hasta una hora antes del anochecer”. Los mayores descensos de fallecidos por franja de edad en 2022 se produjeron en los grupos de 25 a 34 años, con una disminución del 11%, y de 45 a 54 años (9%). El grupo de edad en el que más aumentó la mortalidad fue el de 55 a 64 años, con 197 fallecidos, un 23 % más que en 2019 (160).
Conducción nocturna. “Los fallecidos por accidentes de tráfico durante la noche, al amanecer o al atardecer representan casi el 40% pese a que a esas horas hay menos tráfico. Aunque hay menos siniestros son proporcionalmente más graves. Como la circulación de vehículos es más baja, te puede dar la impresión de que estás solo, con más espacio, lo cual invita de alguna manera a correr más. Otro riesgo potencial se puede dar en los viajes en solitario y en una carretera convencional con poco tráfico. Si el conductor no está descansado, existe un riesgo de dormirse… Y ya sabemos lo que pasa”.
Parque de vehículos con una antigüedad media de más de 13 años. “Siempre recomendamos planificar con antelación el viaje y cuidar la puesta a punto del vehículo. La ITV [Inspección Técnica de Vehículos] garantiza que el parque circulante reúne las mínimas condiciones. No tenemos accidentes porque la rueda se te haya salido o te hayas quedado con el volante en la mano… No son significativos. Otra cosa es que es los coches nuevos tienen más sistemas de seguridad y ayudas a la conducción, con lo cual son más seguros que los coches viejos”.
Cuidado de las ruedas. “Hay que prestar una especial atención a los neumáticos. ¿Por qué? Es la parte del vehículo que está en contacto con la carretera. El dibujo de los neumáticos, no llevarlos lisos y gastados, es muy importante. Y también que tengan una presión razonable porque, insisto, son la parte que toca el asfalto”.